20190123

Soberbio: Giovanni Gabrieli con más brío, energía y velocidad.

Giovanni Gabrieli es un autor italiano veneciano de principios del siglo XVII cuya obra no tiene calificativos lo suficientemente brillantes. Organista oficial de la catedral de San Marcos y director de la Scuola Grande de San Rocco, Gabrieli escribió los más brillantes pasajes de la música de todos los tiempos. Con un pie en la Iglesia y el otro en el arte profano dejó el listón tan alto que a ver quien es el guapo capaz de superarlo. Cójase cualquier porquería obra actual y no hay color. Vamos, ni color, ni sabor, ni olor. La música de este maestro veneciano es una arquitectura calculada al milímetro, preñada de delicadeza, contrapesos y equilibrios; matemática y geométricamente perfectas. Nunca en vuestra decadente vida moderna vais a poder disfrutar de nada igual.

Y si además le sumamos el empuje de autores modernos que se toman la libertad de interpretar al maestro veneciano con más vitalidad, velocidad y energía, entonces ya se convierte en un goce ilimitado. Es el caso del búlgaro Vassil Kazandjiev, quien nos brindó en 1969 una de las más magníficas interpretaciones de la música del maestro veneciano. Se trata de un autor e intérprete nacido en 1934 y formado [por supuesto] en la Bulgaria comunista [el comunismo sólo produce pobreza buuuuuuu jajajaja!!!!]. Kazandjiev ha sido reconocido como uno de los destacados compositores y directores búlgaros. En 1962, fundó el conjunto de cámara de solistas de Sofía, con el cual tuvo conciertos muy exitosos en Bulgaria y en el extranjero durante 15 años. Fruto de aquella aventura, nos dejó esta maravilla: