
Pero en este caso va a resultar que es casi cierto o aparentemente cierto. La compañía fabricante de refrescos venenosos ya no se conforma con vender su pócima habitual. Ahora, como gran novedad, incluirán tejidos extraídos de fetos humanos abortados. Todo ello para que tenga un sabor un poco más dulzón, por lo que dicen. La Administración Obama considera normal el uso de fetos abortados para saborizantes, así que no problem.
El principal abogado de la firma George A. Schieren ha señalado que la resolución debe ser excluida debido a que "se ocupa de asuntos relacionados con las operaciones comerciales de la empresa común" y que "ciertas tareas son tan fundamentales para dirigir una empresa en el día a día que no pueden ser objeto de una acción de supervisión".[Nota del T.]: Las grandes corporaciones somos los reyes del mambo y hacemos lo que nos sale de los cojones en nombre del sistema de "libre empresa". ¿O qué queréis, vivir como en Corea del Norte?
La búsqueda en inglés en google human fetuses used as a flavoring da fe del impacto que la noticia ha causado tanto en los USA como en el resto del mundo. Por supuesto, no han faltado las alusiones al Soylent Green, un apetitoso alimento en forma de pastillas de sopicaldo que los habitantes de un mundo superpoblado consumen como único alimento, en un film homónimo protagonizado por Charlton Heston. Al final de la pinícula Charlton descubre que las pastillas están hechas de cadáveres.
Cada día estoy más convencido de que los escritores de ciencia-ficción de los años 20's a 60's fueron visionarios. Todas las maquinaciones, regímenes totalitarios y armas de destrucción masiva que salieron de sus mentes enfermas son ya una realidad.