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20190127

Peligro: capitalismo en estado de coma

La historia del capitalismo sólo tiene una lección. Cuando el sistema colapsa y ya no hay un sólo refugio para el Capital, recurren a la guerra. La guerra es el negocio más rentable que hay.

Las lecciones de Marx y Engels fueron olvidadas con la victoria de Reagan y los Bush sobre el comunismo. Fueron enterradas como el producto de pensadores con "ideas equivocadas". Prevalecieron los Adam Smith, David Ricardo, Friedrich von Hayek y su nefasto alumno Milton Friedman, unos ilusionistas que pasaban por economistas y que difundieron extrañas milongas sobre la capacidad de "los mercados" para autorregularse ellos mismos y generar riqueza por si solos. Es decir, el "libre mercado" hace que todo el mundo pueda disfrutar de las piruletas de fresa. Es super-chuli.

La realidad ha demostrado que el capitalismo es un frenesí diabólico que sólo conduce al abismo. En el siglo XXI no ha generado riqueza: lo único que ha generado es deuda. No es lo mismo ser propietario de un Ferrari que estar pagando un Ferrari. Es una lección de economía que incluso un garrulo puede entender. Aparentar riqueza cuando estás endeudado hasta las trancas no es riqueza: es pobreza.

El capitalismo surgido del derrumbe de la URSS sólo ha generado deuda, luego POBREZA.

Ha llegado el momento de cerrarle la boca a estos charlatantes. La pura realidad es que el capitalismo liberal que se inauguró con la caída de la URSS no ha durado siquiera 30 años. Las consecuencias de este capitalismo que se reinventa a si mismo constantemente son funestas: el cadáver lleva muerto desde 2008, pero han tenido una maravillosa capacidad para embalsamar la realidad y hacer creer que hay "crecimiento". Y sobre la superficie inerte del engendro momificado, han superpuesto capas y capas de maquillaje. De maquillaje financiero, para ser exactos. Porque yo lo valgo.
Crisis del Capital, by Pinch
La putrefacción se huele a kilómetros. A medida que entramos en un nuevo año, el mundo se enfrenta a un punto de inflexión decisivo. La crisis del capitalismo está alcanzando niveles estratosféricos que amenazan con derrocar todo el orden mundial surgido, tras doloroso parto, de la Segunda Guerra Mundial.

Diez años después del colapso de 2008, el capitalismo financiero no está ni de broma cerca de resolver la crisis económica. Todos los sacrificios y la austeridad de los últimos 10 años no han resuelto la crisis, solo han aumentado el sufrimiento, el empobrecimiento y la desesperación de las masas, mientras que una pequeña minoría de parásitos ha adquirido niveles obscenos de riqueza.

Hace una década comenzó a verse claro que todos los intentos de los gobiernos por restablecer el equilibrio económico solo servirían para destruir el equilibrio social y político. Diez años después la situación continúa igual..., no, peor.